martes, 8 de marzo de 2011

Deslucidas reflexiones sobre Efectividad Escolar

En el mundo de la efectividad escolar uno requiere aprenderse algunas detalles bien simpáticos, que, como gran parte de la psicología, responden a ese “siempre lo supe, pero nunca se me ocurrió” que acontece generalmente en esta disciplina Por supuesto hay de todo, y siempre uno se sorprende con algunos detalles, pero la mayoría parecen acercarse al extraño y mal ponderado “sentido común”.
Por lo mismo, los estudios de efectividad escolar son variados y en general intentan arrojar algo de optimismo en ese concierto de Lacrimosa que es el estado educacional en Chile, apelando a que sí se puede hacer las cosas bien aunque todo vaya mal, y que Jack no tiene porque soltarse y morir congelado. Lo mejor de todo esto es que la desesperación nos pone ansiosos y nos hace olvidar que lamentablemente somos una ciencia social, y en las ciencias sociales las prescripciones del tipo receta medica lamentablemente no funcionan tan bien como en la otra ciencia (la que se cree la muerte).
Como ejemplo veremos algunas variables de efectividad del estudiante de psicología educacional:

- Asiste regularmente a sus clases y toma apuntes recurrentemente.
- Realiza sesudos comentarios uniendo la materia con la realidad de Chile y entregando una visión negativa pero con un dejo de optimismo.
- Se esfuerza por entregar puntualmente y con una decente cantidad de líneas trabajos, informes, mapas conceptuales (esos tienen otro tipo de lineas), bitácoras, y un bosque de problemas. Nota: En los informes de pre-práctica esto se traduce en centímetros de grosor arriba del digito siete, o numero de páginas sin incluir anexos que sea el doble del informe anterior.
- Aunque discrepa en parte con el exceso de carga, sus descargas son muy académicamente correctas y de hecho, aplica los conocimientos adquiridos en el area para expresarla. Al igual que en algunas prácticas, son recibidas con sonrisas y buenas intenciones (y ojala galletitas).
- Ama sin dudas la psicología, la educación, la patria, Dios, y la Universidad.

Por supuesto, si tu eres un nuevo estudiante de psicología educacional (lo cual no se si creerlo porque hay muy poca gente que en verdad le importa este espacio…entendiendo importa con leer aunque sea un par de líneas), quizás quieras tomar estas indicaciones y querer ser algo así este semestre, que te asegurará un buen desempeño, no tanto llanto quizás y un buen status en la mención que de por sí es pequeña. Sin embargo, es ridículo intentar seguir estas directrices solo porque alumnos efectivos sean así (y lo más probable es que sea estúpido seguirlas porque las escribí con ese fin)

No, no es estúpido seguirlas solo porque yo no cumplía esas características y que mi acercamiento principal en muchos módulos fuera inconcientemente a través de la teoría del sueño (no duermo en clases sin un fundamente teórico, lease La Interpretación de los Sueños de Sigmund Freud para mayores detalles al respecto, y léase somnoliento).

La verdadera razón es que las variables de efectividad son solo un norte, y como se recuerdan, un clásico “siempre lo supimos”. Evidente que es bueno que un colegio tenga un clima para discutir sano y un sentido de la identificación digna de nazis.
Por supuesto que es deseable que el profesor se concentré tanto en sus niños y crea tanto en sus posibilidades como si de cura procesado se tratará.
Obvio que una familia debe tener expectativas y deseo por la formación de su joven retoño para que gané dinero y dejé de alterar la mínima paciencia que le quedan a sus padres (o abuelos últimamente). "Os odio por arruinar mi juventud...pero debo seguir sonriendo"

Obvio que sabemos todo esto, y nada más apestoso que alguien te lo recuerde como si de un imbécil te tratarás. El encanto del psicólogo en general es que piensas que sí eres un imbécil, pero bien intencionado, y que sin darte tanto cuenta puede tomar esa intención y llevarla a lugares menos destructivos, siempre dando la impresión de que es un camino co-construido, aunque tenga harto de manipulación dentro de las oscuras mentes de esos profesionales de la psique.

En conclusión, las variables de efectividad son interesantes datos que nos otorgan un buen lugar a donde llegar, pero cada colegio, cada persona es bastante distinta, y por ende hay que manipu…digo, co-construir con él un dialogo común, un camino que permita tomar objetivos transversales como por ejemplo, hacer un buen trabajo en aulas, y a través de ello ir trabajando aspectos de éste que puedan no ser del todo efectivos.

¿Se puede hacer a un colegio mediocre en uno efectivo? Yo creo que sí, pero nunca diciendo “esto tenemos que hacer porque así lo dice Arancibia (1992)”, sino trabajando con el colegio eso que le es propio, único e intransferible para que de ello surja su propio modelo de efectividad (que curiosamente se parecerá en esqueleto a lo que esta en tantos textos). Bueno, todo esto con mucha paciencia, tiempo, y dinero….y suerte!

1 comentario:

  1. “esto tenemos que hacer porque así lo dice Arancibia (1992)”... Jajajajaja, notable!

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